Esta fotografía nos
muestra la mínima distancia posible establecida por el deseo. Pertenece a uno
de los mejores artistas argentinos del género, Pedro Luis Raota, quien supo crear
imágenes allí donde los demás sólo veían sombras. Ganador de innumerables
premios internacionales fue considerado en su momento uno de los diez mejores
fotógrafos del planeta.
Pero existe otro lado de la distancia, la
lejanía. Las cartas manuscritas de alguna manera la vencen.
Mayo de mis ganas,
de mi barrio al tuyo.
Flaquita:
Con esta tinta y este papel cumplo tu deseo de
llegar a vos para conocer de mí lo poco que te queda por conocer: mi letra,
hija de mis manos -esas que te gustan no sólo sobre tus zonas, también en los gestos
que sobre la mesa de los bares se me da por delinear cuando te cuento mis
aventuras por los mares de la mente-.
Sin embargo, algo de mi manera de escribir
advertiste ya en tu cuerpo, esa tarde desnuda de sol, en la penumbra de nuestra
habitación ocasional, cuando te pedía que adivines los mensajes que sobre tu
espalda dibujaba con mi dedo. Digo esto y se me encumbran los anhelos, te pido
volvamos pronto a delinear nuestra personal literatura; escribir es como si
volviera a tocarte.
Mi recuerdo de la noche de ayer es un bosque denso,
fragante; me arrastraste hacia esa bella perdición que resultan los pliegues de
tu profundidad y gocé de mi segunda y salobre vida. Tu desliz lento por la vaga
blancura de las sábanas elevó los aparejos de mi nave. Y sentí que poner rumbo
hacia tu mar interior, era una orden suprema.
Nunca serán exagerados mis elogios. Llegué desde mi
noche hasta el alba de tu juventud, con el cuerpo lleno de cicatrices que
supiste suturar a puro beso delicado. Tu lozanía es el remedio justo para mi
madurez. ¿Con el plateado de cuantas lunas inventaron tu piel? ¿Bajo qué
combinación de planetas y con cuál secreta chispa de los astros fue creada tu
silueta?
La distancia que existe entre tus besos y los míos
es la misma que hay de los míos a los tuyos. Y si algún físico intenta negarlo
le tiraremos con algunas manzanas (Newton comprenderá). Viene esto del eco de
la sensación que ayer mismo tuve al momento en que, desde cada lado de la mesa,
nuestras miradas tenían la profundidad de lo ancestral, en su encuentro habitaban
mil hombres y mil mujeres que se amaron antecediéndonos. Y ahí decidimos
homenajearlos en una cama.
Para algo me sirvió todo lo leído, he sentido
elevarme sobre las baldosas al confesarme que te sedujo de mí esta forma de expresarme,
como aquella primera cita: -“lo que yo necesito es alguien que me hable como
vos”- y te ruborizaste. Fueron tus ojos los que prometieron otro ritual, otra
entrega, ya que tu mirada fue una primera entrega, un primer ritual. Y así ocurrió
el sublime acto de tu apertura al recibir mis ganas.
Flaquita mía, sabés cumplir mis deseos y te
entregás con dulce impiedad.
Me diste vida, aquí y aquí.
Con amor,
siempre yo, el mismo.
Mi carta fue sólo un acto de amor. Pero si la distancia es grande suele derivar en vacíos imposibles de llenar: allí es cuando aparece eso tan bien reflejado en este tango, la nostalgia, que es enorme cuando se trata de una ruptura de amor.
“Nostalgias”
Canta: Melisa Fernández / Piano: José
Corchete
Música: Juan Carlos Cobián / Letra: Enrique
Cadícamo
Comparto
la letra para quienes no hablan nuestro idioma:
Quiero emborrachar mi corazón para
apagar un loco amor
Que más que amor es un sufrir.
Y aquí vengo para eso a borrar antiguos
besos
En los besos de otras bocas.
Si su amor fue flor de un día
¿Porqué causa es siempre mía esa cruel preocupación?
Quiero por los dos mi copa alzar para
olvidar mi obstinación
Y más la vuelvo a recordar.
Nostalgias de escuchar su risa loca y
sentir junto a mi boca
Como un fuego su respiración.
Angustia de sentirme abandonado y pensar
que otro a su lado
Pronto, pronto le hablará de amor.
¡Hermano! Yo no quiero rebajarme ni pedirle, ni llorarle
Ni decirle que no puedo más vivir.
Desde mi triste soledad veré caer las
rosas muertas
De mi juventud.
Gime, bandoneón, tu tango gris quizás a
ti te hiera igual
Algún amor sentimental.
Llora mi alma de fantoche solo y triste
en esta noche
Noche negra y sin estrellas.
Si las copas traen consuelos aquí estoy
con mis desvelos
Para ahogarlos de una vez.
Quiero emborrachar mi corazón para
después poder brindar
Por los fracasos del amor.
GRACIAS POR LEER Y ESCUCHAR
Dulces letras llenas de amor, deseo y gratitud.
ResponderEliminar¡Qué diferentes son los tiempos, aquellos en que iban y volvían esas cartas que esperábamos ansiosos...!
La primera vez que escuché "Nostalgias" fue de la mano de Andrés Calamaro y me cautivó.
Un abrazo.
Hola Paula, es cierto, bellos tiempos, pero esa carta la envié no hace mucho, en épocas ya virtuales.
EliminarNostalgias es un tango muy conocido, pero yo decidí poner una versión que suena más "argentino" que la de Calamaro.
Abrazo también.
Me encanto leer, esta carta de amor, tan sensible y llena de dulzura hacia la enamorada.
ResponderEliminarEs cierto que se ha perdido mucho romanticismo, aun cuando escribirse por correo eléctrico es más rápido que el de antaño, tal vez esa espera diera más intensidad a los sentimientos, no lo sé, creo que todo depende de la sensibilidad de cada persona y la manera de amar.
Las palabras tiene mucha fuerza y si quien las recibe sabe interpretarlas es una comunicación muy linda.
Ese tango es triste, pero lindo.
Un besote, feliz semana
Hola Campirela, he vivido las dos épocas, y más allá de que esta carta la escribí en tiempos ya virtuales, estoy seguro de que cuando no existía internet era todo más intenso ya que toda comunicación era más difícil.
EliminarGracias y un abrazo.
Me gustan las cartas siempre son muy románticas . Aunque parecen pasada de moda. Me gusto mucho la tuya es muy apasionada. Me gusto el video y la imagen. Te mando un beso.
ResponderEliminarAsí es Citu, son algo muy bello que se ha perdido. Gracias por tu visita.
EliminarBeso para vos.
En algún tiempo las cartas eran el único medio para mantener vivo el amor entre dos amantes que por diferentes motivos tenían que hacerlo así Desde Víctor Hugo hasta Pablo Neruda, entrar en sus mundos intimos,deja la bella sensación que aun ni la mas grande distancia es capaz de separar un buen amor.Tu declaración de amor, se pasea entre,magia,gratitud,nostalgia y respeto.eL tango es hermoso en esta version que compartes,este es otro texto capaz de asombrar por la belleza de las palabras y las imágenes que libres se disparan en la mente de los que leemos,sintiendo tu entrega.Te dejo varios clap-clap! como siempre y un besin delicado como tu texto.
ResponderEliminarHermoso tu comentario Menta, fresco como tu nombre, cálido como tu persona.
EliminarQuedo muy agradecido.
Y un beso.
Que bello recuerdo el de escribir cartas, de chica y más joven las escribía, que emoción era cuando te llegaba una! Hermoso texto, mezcla de emociones intensas el recibir una carta de amor... Me encanta como describis esa lejanía y cercanía de los amantes, el contacto con su piel, el escribir sobre su espalda, el simple roze, la cercanía con esa persona que te desborda las sensaciones, nos hace latir fuerte el corazón y sonrojarnos sin duda... Besos por ahí! Siempre un placer leerte!
ResponderEliminarHola Mari, siempre un placer recibir tu visita. Me gusta compartir esas sensaciones que dejan las cartas manuscritas, me alegra que sientas parecido.
EliminarMuy buen comentario, lo agradezco.
Besos por allí.
!Qué tremenda tú manera de rascar ese papel imaginario que atraviesas con tu pasión desbordante y q aunq así sea , manejas con esa delicadeza tan tuya tb , idealizando esos recuerdos del amor amado que se diluye entre tus palabras mientras nos dejas a todos jajaja ... sin aliento al leerte...Mil gracias EUKEL y tb gracias por este precioso tango..aunq a mí, en lugar de esta preciosa voz que has elegido... me gusta muchísimo más arrastrado y con la voz rasgada...si encuentro lo q ahora solo escucho en mi cabeza te lo traigo ...un abrazo muy muy fuerte .Tb tú tienes corazón de tango, no hay la más mínima duda ; )
ResponderEliminarHola María, elegí una versión diferente a las conocidas, imagino un par de las que tal vez esté la que te gusta, ya me lo contarás, ocurre que no quiero repetir siempre a los mismos grandes del tango como Goyeneche, Rubén Juarez y algunos más.
EliminarGracias por los elogios, es muy grato saber que se transmite todo eso al publicar. Y de los elogios el que me encantó es el de que tengo corazón de tango, halagado y orgulloso... ¡¡Gracias mil!!
Abrazos.
!Qué tremenda tú manera de rascar ese papel imaginario que atraviesas con tu pasión desbordante y q aunq así sea , manejas con esa delicadeza tan tuya tb , idealizando esos recuerdos del amor amado que se diluye entre tus palabras mientras nos dejas a todos jajaja ... sin aliento al leerte...Mil gracias EUKEL y tb gracias por este precioso tango..aunq a mí, en lugar de esta preciosa voz que has elegido... me gusta muchísimo más arrastrado y con la voz rasgada...si encuentro lo q ahora solo escucho en mi cabeza te lo traigo ...un abrazo muy muy fuerte .Tb tú tienes corazón de tango, no hay la más mínima duda ; )
ResponderEliminarIdem a lo que antes te comenté, no te preocupes que hay moderación de comentarios, por eso no aparecen pronto, si me quedo dormido tardo un poco en liberarlos, jeje.
Eliminar¡Qué nostalgia (aprovechando el tango que traes) de las cartas manuscritas! Esos días pendientes del buzón para ver si llegaba o no, la ilusión con que abría el sobre y leía ansiosa el contenido. Y cuando era la carta de un amor, como la que tú escribes, esas emociones se multiplicaban por mil.
ResponderEliminarHermosa y romántica tu carta. Por destacar algo elijo: "...nuestras miradas tenían la profundidad de lo ancestral, en su encuentro habitaban mil hombres y mil mujeres que se amaron antecediéndonos". Imagino el homenaje.
El tango es uno de mis favoritos. Me encanta en todas las versiones que he escuchado, y han sido muchas. Ésta también
Besos
Hola Alís, qué buen comentario, me gustan mucho los que son así de bien desarrollados y demostrando un profundo análisis de lo leído.
EliminarUn beso agradecido.
Hola Eukel, me encantó la fotografía que compartes, grafica muy bien el deseo.
ResponderEliminarSiempre me gustaron las cartas, escribirlas y recibirlas. Siento que al escribir se expresa muchas veces mas que al hablar. Se empieza a escribir y las palabras brotan espontáneamente al ritmo de los sentimientos.
Un abrazo
Claro, Soñadora amiga, así es, en una carta se pone mucho de uno mismo y lo escrito queda una vez enviado, no se puede borrar, queda para siempre.
EliminarAbrazo también.
¿Sabes que hay un concurso de cartas de amor? Yo me enteré hace un tiempo, y aunque la tuya sea auténtica es una preciosidad digna de ganar un premio (amor + erotismo). Peo el premio sería para tu chica, sin duda, al leerlo.
ResponderEliminarHay muchas frases enmarcables, pero ésta, particularmente me entusiasma por todo lo que encierra, porque hace que el amor de dos sea de Dos, en mayúsculas:
"desde cada lado de la mesa, nuestras miradas tenían la profundidad de lo ancestral, en su encuentro habitaban mil hombres y mil mujeres que se amaron antecediéndonos"... Hay cabe mucho, mucho, mucho... es el Amor en mayúsculas, símbolo de la unión universal de hombre y mujer.
Felicidades por esta preciosa entrega, música incluída.
Y un fuerte abrazo! :)
Hola Volarela, siempre un gran gusto recibir tu visita. También siempre agradecido, tus comentarios son muy bellos y completos. Esa frase que elegiste parece que deja huella, le ha gustado a varios, se me eleva el ego y choca contra el techo, jaja.
EliminarNo sabía de ese concurso ¿Dónde es? ¿es por la web?
Fuerte abrazo retribuído.
Me encanta esta voz de mujer, qué bello conjunto hace con el pianista. Voy a conocerla a You Tube, gracias!!
ResponderEliminarTiene varios tangos muy lindos, creo que anduvo de gira por tu país, los videos son con ese pianista que es muy bueno.
EliminarDe nada.
Qué delicia!
ResponderEliminarEres un mago en la sensualidad varonil. Un "maestro"de la seducción con tus palabras.
Las cartas... te acuerdas? Qué cosa linda era recibirlas!...
Hola Grace, gratas palabras las tuyas, me halagan.
EliminarLas cartas... claro... hermosos tiempos, inolvidables.
Prodigiosa voz la de Melisa Fernandez. Gracias mil; no la conocía.
ResponderEliminarMe encantó!
No es muy conocida a pesar de que hizo giras por el extranjero. Su voz es exquisita, tiene variantes de tono y de dinámica, sabe finalizar muy bien las oraciones musicales. Lo único que tendría que ser menos teatral en sus movimientos, pero eso no importa.
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